El Ejército del Aire anuncia hoy que por parte del EZAPAC y con la participación de otras unidades del Ejército del Aire, se ha impartido un curso para formar a 12 militares del ET como observadores de fuego aéreo. La noticia parece dar a entender que el curso pretende calificar a sus alumnos para poder coordinar desde tierra las misiones CAS aéreas y proporcionar el necesario BDA (Battle Damage Assesment). De este modo los asistentes podrían, llegado el caso, contactar por radio con el elemento aéreo, identificar objetivos a batir, señalizar los mismos y proporcionar información sobre los daños inflingidos.

Primer curso de observador de fuego aéreo en Alcantarilla

Madrid, 7 abr (Ejército del Aire).- Del 3 al 14 del mes de marzo se desarrolló, por primera vez, en las instalaciones de la Escuela Militar de Paracaidismo (Base Aérea de Alcantarilla, Murcia) el curso de observador de fuegos aéreos, impartido por el Ejército del Aire para una docena de oficiales del Ejército de Tierra, y cuyo propósito, es incrementar la capacidad de apoyo aéreo mediante la correspondiente calificación que les permita ser capaces de detectar, localizar e identificar objetivos, y solicitar apoyos de fuego aéreo, así como proporcionar la información necesaria para las misiones de apoyo aéreo cercano y finalmente evaluar los efectos de las acciones de fuego aéreo.

El curso tiene dos fases, puesto que el Ejército de Tierra imparte otra más específica. A la finalización de la misma la Escuela Militar de Paracaidismo otorga un certificado acreditativo a quienes superaron ambas fases. El profesorado, oficiales y suboficiales, fue aportado, en función de las materias a impartir, por el Escuadrón de Zapadores Paracaidistas (EZAPAC), Alas 14, 12 y 15, y en la fase práctica contó con la participación de aeronaves de las Alas mencionadas así como E-25 de la Academia General del Aire.

Hubo una fase previa, que podríamos determinar como de definición de necesidades, y que se desarrollo desde el día 28 de enero hasta el 1 de febrero. En la misma, personal de la Dirección de Enseñanza, MACOM, Alas 12 y 23, CEGA (Centro de Guerra Aérea) y la Escuela Militar de Paracaidismo constituyeron un grupo de trabajo cuyo propósito era, además de definir el el plan de estudios, establecer las necesidades de personal, material y medios aéreos para la realización de las fases teórica y práctica, así como los requisitos para la obtención del título.